Canadá, una de las economías más fuertes del mundo, es un destino soñado para muchos que desean trabajar y vivir en un entorno próspero y multicultural. Cada año, más de 250,000 trabajadores extranjeros temporales llegan a Canadá, desempeñándose en sectores diversos como la agricultura, la tecnología de la información, la manufactura y los recursos naturales. Si tú, como muchos latinos en Toronto, aspiras a ser parte de esta vibrante comunidad laboral, aquí te presentamos tres pasos fundamentales para lograrlo.
Paso 1: Obtener una Oferta de Trabajo
El primer paso esencial es conseguir una oferta de trabajo de un empleador canadiense. Esto se puede lograr a través de conexiones familiares o amigos, programas gubernamentales como el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales, agencias de reclutamiento canadienses o sitios web de empleo. Aunque las posibilidades de obtener una oferta a través de sitios web pueden ser bajas, siempre es recomendable subir tu currículum y mantener la esperanza. Si eres ciudadano estadounidense o tienes una visa de visita válida para Canadá, considera la posibilidad de venir al país y hablar directamente con posibles empleadores. Recuerda, es ilegal que te cobren por encontrar trabajo en Canadá.
Paso 2: Recibir los Documentos Preliminares
Una vez que tengas una oferta de trabajo, tu empleador canadiense necesitará obtener un permiso especial de la oficina laboral canadiense, conocido como Evaluación de Impacto en el Mercado Laboral (LMIA). Si tu empleador recibe un LMIA positivo, podrás proceder con la solicitud de un permiso de trabajo. En algunos casos, el trabajo puede estar exento de LMIA, y tu empleador necesitará solicitar un código de exención. Mientras tanto, debes preparar documentos de identificación, formularios de permiso de trabajo y documentos que demuestren que cumples con los requisitos del trabajo.
Paso 3: Solicitar un Permiso de Trabajo
Aunque algunos trabajos están exentos de requerir un permiso de trabajo, la mayoría sí lo necesitan. Este permiso te permite vivir y trabajar en Canadá. Si has completado con éxito los dos primeros pasos, debes solicitar un permiso de trabajo, que puede ser válido por unos días o varios años, pero puede imponer ciertas limitaciones, como la ubicación o el empleador. Asegúrate de cumplir con todos los requisitos para evitar perderlo o ser expulsado de Canadá.
Un permiso de trabajo en Canadá es temporal. Si tu intención es vivir permanentemente en Canadá, deberás considerar la posibilidad de inmigrar. Si tienes familiares, como un cónyuge o hijos, ellos también podrían acompañarte bajo ciertas circunstancias. Recuerda, esta guía es un punto de partida; siempre es recomendable consultar con un profesional para obtener asesoramiento específico y actualizado.
Fuente: Parsai Immigration Services